Tito Lucrecio Caro se suicida sonriendo

Qué fracaso vivir
habiendo amado tanto los vestidos de gasa
de las vírgenes
y no su contenido.

He de morir ahora
y me crece la duda...

Ni en lo definitivo soy preciso:
no sé si la cicuta o un baño
con las venas desbocadas,
no sé si darle al mar la suerte de mi cuerpo
o hacer un vuelo último desde el acantilado...

...Moriré sonriendo en todo caso.

...Me perderé en el sueño
y reiré con la Parca;
que antes que Miguel d’Ors lo dijo el Marca:
“mañana se retira Butragueño”.

La vida es una flecha hacia la nada.

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