Ovidio busca el sueño y le puede la vigilia

Noches para beber,
para hacer el amor
en una cama.
Noches para leer
a Buck y a Carver.
Noches para escribir
versos malísimos.
Noches para pensar
en mis miserias,
en las vuestras.
Noches para llorar
de desencanto.
Noches para morir
tan sólo un poco.
Noches para mirarme
el sexo lacio,
inútil para el gozo
de la carne.

Noches para morirme
un poco más despacio
que los muertos.

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