Pasión
PASIÓN [A Antonio Carvajal y a Belén Artuñedo, por dejarme robarles un par de versos.] Con estos mismos labios hechos para la guerra me saciaré en la pulpa coronada de vello que es vértice espumoso donde pongo mi sello de barba entre tus piernas posadas en la tierra. Me morderé los dientes perdido entre tus sierras, te libaré la boca y arderé en tus cabellos rizándose en volutas de los humos más bellos que sahumaron los campos heridos por mil guerras. Teniéndote abarcada ya nada es imposible. Ni la muerte, ni el ansia, ni el tiempo son estorbo, pues el deseo habita donde todo es posible. Cercado está tu vértice por mi cremosa llama que se eleva, votiva, alimentando el morbo, así como se acuesta la noche en una rama. © lfc 1999