Íbico resucita y tiene miedo

Me asusta el mar,
la brisa de sus costas,
el resto de un naufragio
que me espera escondido
tras un hombre Burberry’s
que aguarda a que la parca
le ponga un epitafio
y una fecha de cierre;
me asusta que la gente
sonría sus cervezas
y se embriage de risas
que yo nunca he tenido;
me asusta la tenaza
que los castaños indios
conforman en el parque
que paseo a diario;
me asustan las palabras
que digo y que no pienso...
Me asusta no asustarme
de lo que nunca he visto.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Poesía... ¿originalidad o personalidad?

Un poema ciático.