Etapa prólogo

La chica de la rampa,
la que sujeta el sillín
como una cesta
de la compra
o un sexo ajeno,
ayer desayunó leche desnatada
con Kellogg´s All-Bran Flakes,
pero aún sigue sin poder
relajar el gesto
–que ahora es sonrisa
y también mueca–,
siente rubor cuando sus dedos
rozan la carne de culotte
y empuja levemente...
Un viento de pedales
le levanta la falda
de pin-up by Ralf Lauren
y advierte con rubor
que sus bragas de blonda
serán primera plana
en el diario L’Equipe
junto a un belga sonriente
con maillot amarillo
de Crédit Lyonnais.

Quizás un Gatorade
con foie en la zona vip
consiga que la etapa
termine sin más doping
en algún sanitario
de la sala de prensa.

Luego un agua Perrier
en el hotel y acaso
reír junto a las motos
Honda de TV-5
los chistes de un mecánico
francés del Fassa Bortolo.

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