EL HORIZONTE DEL INFINITO

A veces me pregunto
cómo será el horizonte
del infinito

y temo que no exista
un lugar de silencio
para ser mancillado
por unos pies
o un pensamiento firme

Entonces me desdoblo
y discuto conmigo
hasta errar
y distanciarme.

Al cabo me consuelo,
pues lo que no une la razón
lo deja atado el tiempo.

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