Nada hay que dure

NADA HAY QUE DURE
a Julio César Navarro

Nada hay que dure, amigo, o verdadero,
ni que no te desgaste o te envejezca...
nada que te haga eterno en esa gresca
de muchachos abriendo el monedero.

Tampoco serás uno en el mortero
de la vida, porque de la grotesca
pasión arrebatada de la pesca
del uno, no lo dudes, sales huero.

Con esta arquitectura, ¿qué decirte?...
estrecha tu valor en lo indecente
y apura el haz que eres con la boca,

agota lo que puedas antes de irte,
y en la hora de todos sé el ausente,
el que apaga la luz y el que la invoca.

© lfc

Comentarios

  1. No te había imaginado escribiendo sonetos, y mira tú por donde... cuanto más amplio el abanico, mucho mejor. Además se agradece un soneto en el que las amapolas dejen paso a los muchachos abriendo el monedero, y las perlas en los labios estrechen su valor en lo indecente, se agradece, sí señor.

    Abrazos
    Marian

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  2. Siempre fui sonetero, Marian. En todos mis libros dejo algún soneto y uno de ellos, "Barba entre tus muslos", es un sonetario amoroso y bufo [lo buscaré e iré subiéndolos a la red].

    Un abrazote

    ResponderEliminar

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